lunes, 30 de julio de 2012

Un día de fe y de echarme a vivir


Buenas noches soñadores de la justicia, hoy es un martes en su inicio (00:00) estamos en el último día de julio del 2012, tal vez una fecha como hoy jamás se vuelva a repetir puesto que fue mi primer día como redactor de deportes y crónicas viajeras en el diario El Callao, me parece mentira haber encontrado un lugar para laborar donde la competencia movida por el libre mercado le den paso notas reflexivas, con ayuda de la red Internet.

Sin duda Internet es una herramienta indispensable en el periodismo de hoy donde la globalización hace que los pequeños marquen la diferencia hacía adentro de su país, rescatando los valores, tradiciones y formas de vida que hacen en su conjunto nuestra identidad nacional.

La fe sin duda es la parte clave en toda actividad del ser humano, sin esta todo nos condenamos al fracaso inminente, puesto que el dinero es solo una parte de un todo llamado empresa, que sin voluntad, dedicación, supervisión y ventas no existiría, así como tampoco tendría razón de ser.

El Perú de hoy está partido en dos, tal vez desde hace mucho puesto que “gran cantidad de ciudadanos” no tiene fe en esta tierra, mientras que otra gran “cantidad de ciudadanos del mundo” están aquí por que nuestros standards de crecimiento son un atractivo interesante, sino díganme que país crece al 5% anual en promedio desde hace más de 17 años, es que algo tenemos que estar haciendo bien y no nos hemos dado cuenta.

Siempre me pregunto que será aquello que otros ven en el Perú, que los peruanos no sabemos ver? Tal vez sea nuestra generosidad como pueblo noble y con una historia rica, no solo en conflictos sino también en hermanamientos. Quieren un ejemplo recuerden el terremoto del 2007, donde se armaron cadenas humanas para llevar ayuda a lugares como Chincha, Pisco e Ica, y esta es una acción de las muchas que podemos mencionar.

El último lunes por ejemplo se recordó la gran hazaña celeste donde Sporting Cristal, tocó la cima del cielo al llegar a la final de la Copa Libertadores de 1997, nunca podré olvidar esa gran campaña dirigida por Markarián, donde destacaron Solano, Bonnet, Jorge Soto, y también hay que recordarlo con orgullo, un africano que se llevó nuestro corazón a Ghana, Prince Amoako, si quieren mencionar un nacional y 100% rimense hay un nombre que me viene a la mente y que destacó con clase en la goleada por 4-1 ante Racing: el defensa y hoy casi olvidado Martín Vásquez.

Ser feliz y exitoso es sin duda una elección de vida, donde solo tenemos que aprender a no repetir los errores que por vicio innato cometemos más de una vez. Quien escribe estas líneas fue un ciego del alma, que camino cayendo en un mar cuyas olas me volvieron a levantar, para decirle a mis sueños estoy vivo y presente para cumplirlos.

Las olas sin duda son las personas que me aman como mis padres, Mei Ling, Giancarlo, Erick Osores, ELT, Percy Manuel “el pampa” Arana, y sin duda en la lista está Camatex, y el doctor Ramírez Lituma quien este lunes me dio una nueva oportunidad para hacer periodismo, es difícil no mencionar a NT, César “mi conciencia” Ruiz, Ana María “mi alma india” Sihuay, y aunque estén en el cielo no puedo olvidar a mis abuelos y tía abuelo, Roberto, Rosendo y Alfredo.

La vida es sin duda un juego de fe, donde solo puedes no creer o creer, como lo dije una vez es como Indiana Jones en la última cruzada, donde se dio cuenta que solo el hombre creyente podía encontrar los puentes invisibles puestos por Dios, sentidos en el fondo de nuestro corazón y movidos por darle vida a quienes amamos, en el caso de Indiana tenía que salvar a su padre, ese fue el motivo que lo llevó a dar el paso decisivo en la tercera parte de la saga de Spielberg.

Si soy un ejemplo de algo o de alguien pues no lo se, solo se que hoy la vida me puso un reto que a simple vista parece sencillo, pero solo puede ser seguido con la perseverancia de un artesano y con el ojo de un artista que da vida a una historia que el mundo desea leer, para llenar su alma y corazón de esperanza plena.

Empecé haciendo periodismo por que me encantaba el fútbol y lo sigo haciendo por el fútbol y por que se el mundo se merece esperanza para seguir andando y se que yo se la puedo dar a quien lea al subdecano de la prensa nacional: El diario del Callao, que desde este martes llevará a usted: “Las crónicas de un viajero chalaco”, que solo desea rescatar parte de esa identidad nacional, dormida en cada uno de nosotros, por que después de todo desde Tumbes a Tacna, desde el Callao a Pucallpa, y desde Iquitos a Puno, todos somos parte de una gran nación bautizada como Perú.


No hay comentarios:

Publicar un comentario