Hola
señores llegó la hora de otro post escrito por este Guardián de Leyenda que en
este instante enlaza su corazón con sus ondas cerebrales, para mover los dedos
empujar las teclas y escribir un nuevo relato que mi conciencia indique. Este
martes me parece muy importante comentar y llamar la atención sobre lo que mi
Perú necesita con urgencia y no necesitamos importar puesto que está en nuestro
territorio desde milenios, y quienes lo supieron reconocer a tiempo lo
explotaron en beneficio de las nuevas generaciones, esto es: peruanos
comprometidos.
No me
refiero al compromiso del matrimonio, aunque algo tiene que ver, me refiero al
compromiso con el país que nos vio nacer y estamos dejando al libre antojo y no
albedrío de quienes de manera criminal la están dejando podrirse, bueno fuera
que la dejen morir para luego vuelva a nacer, pero la estamos deteriorando de
una sola manera: el desinterés absoluto.
Porqué digo
desinterés, quieren un ejemplo de ello miren a su alrededor cuanta basura dejan
en el suelo o tiran a diario para que otro la recoja, miren cuanta gente está
en los hospitales muriendo por falta de atención, miren cuántos niños con
contaminados con el odio en sus escuelas o los criamos como si tuvieran sangre
azul, acostumbrándolos a que otros trabajen para ellos, sin que estos den nada
de si en el futuro. A esto yo llamaría de alguna manera: apatía o dicho en buen
cristiano estamos criando ociosos.
Hay otro
tema si y uno del cual todos nos quejamos siempre que pierde Perú, no hacemos
nada por recuperar la institucionalidad de la practica deportiva, sin
semilleros no hay lideres y menos campeones que sirvan como referentes. Si en
el pasado los niños se criaban con el televisor hoy se educan con los ojos
firmes en una pc que genera ansiedad y más de una dependencia. Es decir estamos
criando flojos, cuyos cuerpos se atrofiaran por el sedentarismo extremo, ya ni
siquiera se toman la molestia de caminar o tomar agua, debido a que los
benditos energizantes han ganado terreno, ni siquiera gaseosa toman.
Un tema y
para subrayar es la falta de responsabilidad para tener una pareja sentimental,
es que ahora es tan fácil casarse y divorciarse es tal cual ir a un “súper
mercado”, no hay un sentido de tolerancia e inteligencia para escoger a la
pareja, es más la mayoría de personas terminan separadas y odiándose con las
patadas, con quienes juraron “amor eterno”. No digo que el amor no se pueda
terminar, pero la falta de comprensión e intolerancia es más que un mal
endémico. Me pregunto si a usted le gustaría que su hijo tenga cuatro mujeres
alardee de ello y encima no cumpla con sus hijos, no por que no quiera sino por
que simplemente no fue educado en base a valores familiares, por lo tanto es
indiferente al dolor que causa en las mujeres que deja y esto ahora en el
segundo decenio del siglo 21, también funciona a la inversa.
Definitivamente
yo no soy un buen ejemplo de valores, puesto que he reaccionado en lugar de
responder siempre y también más de un deseo de venganza he tenido contra
quienes de manera abusiva me agredieron en su momento por acción e inacción
también. No digo que debamos estar comprometidos con el vecino, pero si debemos
estar comprometidos con la familia (la nuestra), debemos de estar agradecidos
con el trabajo que nos da al menos un sol, y si queremos un trabajo mejor
simplemente hagamos los meritos para demostrarle a otro empresario que si
podemos hacer más rentable su empresa.
Es
complicado que el mundo de hoy la humanización sea un valor agregado, pero de
hecho si lo es la humanización comienza por el respeto hacía nosotros mismos y
nuestras familias, comienza por ser responsables y cumplir nuestra palabra
empeñada y sino podemos hay que saber pedir disculpas. No digo que el mundo sea
fácil y que las cosas no cuesten, pero de esta manera las sabemos valorar mucho
mejor.
Ahora bien
la falta de compromiso se nota desde que dejamos pasar las fechas especiales, y
dejamos de apreciar el día como una oportunidad para cambiar una realidad y
vivamos la vida que nos merecemos vivir. Que tengan buenas noches soñadores de
la justicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario