Buenas
noches mis amigos lectores de este Guardián de Leyenda, hoy en la madrugada del
viernes intentaré reinventarme para lograr un post que sea del mismo estilo
soñador que los anteriores, salvo excepciones que vinieron a mi en momentos de
rabia e ira desmedida, y que quieren soy ser humano también tengo frustraciones
y emociones que llaman a la negatividad que pueden sanarse con un sueño
profundo y abrazo del alma, para con quienes tengo pendiente hacer las pases
con una mirada firme y un silencio que de paso a la sinceridad un gesto tan
simple y fácil como un abrazo hacía mi prójimo.
Bueno tal
vez sea un buen tema para hablar el de las pases que uno tiene pendiente para
curar sus heridas del alma o tal vez sea mejor hablar sobre las miradas
transparentes que desean disculparse con uno mismo. Saben yo como siempre digo
y repito soy un súper pecador y el único mandamiento de los 10 que mando Dios
a Moisés que no he roto ha sido no matar y bueno solo quiero una vida en paz
conmigo, pero en mi vida una persona se ha integrado a ella como si fuéramos un
reflejo de fe: Mei-Ling, quien como su nombre se traduce en chino tiene un
carácter magnifico.
A ver por
que es necesario hacer las pases con el resto antes de dar otro paso
significativo en esta vida, esa es una pregunta que me pude responder hoy luego
una conversa larga con mi jefe, claro siempre en la mesa hubo un buen café con
leche y unas tostadas con mermelada que hicieron más amena la conversa. Don
Abraham el director del diario es un hombre culto de izquierda, mientras que yo
soy un joven adulto y algo maduro de derecha o neoliberalista como me define
este doctor en leyes, y lo que más nos une es la sinceridad de Maestro Jedi a
Padawan aventurero, aunque no llegó a ser ni Luck o Anakim, mientras que don
Abraham es un Yoda (en sabiduría), pero muy pintón y alegre que disfruta de la
música en sus estilos más clásicos.
Aunque
lejanos en pensamiento ambos (don Abraham y yo) coincidimos que no puede haber
izquierda sin derecha y derecha sin izquierda pues ambos entre sí son un
complemento, cuya única coincidencia puede ser la amistad franca expresada en
un buen café, además no tengo como contradecir a una persona que me lleva años
luz en vivencias en todo sentido, solo me queda escuchar agradecer los gestos
de buena voluntad donde también están las críticas constructivas para
corregirme como ser humano, sin duda reafirme que la intolerancia en ningún
nivel es positiva, así como es imperdonable la traición a una persona que dio
todo por uno, por ello me di cuenta que lealtad es un valor inculcado por mi
papá y mi mamá (don Roberto Rendón y Ana María Acat) que no tiene valor y ni
Mastercad, ni Visa pueden aspirar a comprarla.
Años atrás
un don Orlando Maquiavello me hablaba de la gerencia de intangibles y que eran
parte de los valores que promueve la empresa moderna, yo puedo decir que los
valores son dignos de una empresa prospera que trabaja con premisas de culturas
ancestrales en diversos lugares del mundo, puesto que hoy en día la sinceridad
que atrae la confianza es complicada de encontrar por no decir muy difícil de
conseguirla y solo se ve si eres capaz de rechazar una coima o venderte como
ser humano a un mercantilismo digno de la economía de mercado llevado al más
alto salvajismo conocido por el hombre, para una prueba basta con ver un diario
escrito con una tinta de sangre y vestido con fotos porno por doquier.
Tengo que
reconocer avergonzado que la práctica libertina de mi profesión el periodismo
ha denigrado a la sociedad, hasta tener más pecadores y menos valores de vida,
aunque hay de los buenos que defiende la ética y por ello se cumple el viejo
dicho de que “de lo bueno poco” y si es cierto por que si hubiera mucho de lo
bueno lo bueno valga la redundancia terminaría en una inflación o devaluación
del concepto haciéndolo menos valioso, o simplemente verlo como un producto
barato de súper mercado. Mi madre doña Ana María, siempre repite que la “clase”
no depende de cuanto tienes en tú billetera, bolsa o cuenta bancaria, la
“clase” se mide por el nivel ético de tus actividades diarias y saber que pese a las tentaciones nunca
caerás en el abismo, ni dejarás caer a nadie, y no es cuestión de santidad sino
de respeto hacía uno mismo que no espera más que el reconocimiento de mi
conciencia.
Además de
Mei-Ling y mi madre hay una persona buena amiga mía, a quien conocí en agosto del 2010 y que
por esas cosas de la vida no veo hace mucho, aunque ahora trabajamos cerca uno
del otro no hemos coincidido en horarios, pero de hecho fue mi paño de lagrimas
y voz de aliento por mucho tiempo, hoy a esa persona le quiero decir que es
importante para mi, que la valoro por su calidad humana, profesional y amistad
desinteresada, esa persona está de cumpleaños y aunque no diré cuantos cumple
me muero de ganas de darle un abrazo, mirarla a los ojos y más que desearle
feliz cumpleaños, le quiero decir gracias por ser Gigi, la amiga que solo con
una llamada te cambia el ánimo y te da la fe para seguir caminando.
Feliz
cumpleaños Gigi, solo te quiero por una razón o mejor dicho dos tu amistad,
desinterés y tú mirada transparente, ups dije tres, pero la verdad hay mil
razones para quererte o tal vez un millón, pero de lo que estoy seguro es que
nadie puede ser como tú, por que tú como Gigi eres la única capaz de cambiar
vidas con dos palabras: amor y fe.
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