domingo, 3 de junio de 2012

¿Cuándo los peruanos ganaremos un mundial?


Saludos seguidores de este Guardián de Leyenda, hoy en la madrugada del lunes me reencuentro conmigo mismo, luego de dos días cólera y rabieta como lo fueron el miércoles y jueves pasados. Bueno ahora me toca escribir como siempre, entonces lo haré con un canto a la esperanza, aunque para muchos debe de sonar esto a sarcasmo por la derrota peruana ante Colombia, por la jornada eliminatoria, pero no lo no es.

Primero debo de decir que la derrota ante Colombia, es un árbol caído en medio de un bosque del cual según lo veamos podemos hacer leña cuyas cenizas vuelvan a la naturaleza, o podemos usar esa leña para calentar y abrir esperanza de que el próximo partido será mejor.

Hace buen tiempo aprendí que las cosas son lo que uno quiere que sean, puede ser bueno o malo según el uso que le demos, como me dijo una vez don Abraham Ramírez un bisturí puede servir para operar en una cesárea, o para cegar una vida. Que la derrota ante Colombia duele, si nos duele, pero lo primero que debemos decir es que perdió Perú, no perdieron Vargas, Farfán, Pizarro o Guerrero, y tampoco ganó Radamel Falcao García, el duelo lo ganó Colombia, preocuparnos por tantos nombres no hizo olvidar que jugaba un equipo de once contra otro cuadro de once personas y 22 píes que pateaban y perseguían una misma pelota.

Así que lo primero que debemos sacarnos de nuestra cabeza es la absurda idea de que jugamos contra una o varias estrellas, con tan solo cuatro fantásticos, en el campo son 22 personas divididos en dos equipos de once y gana quien más goles anoté. Eso es aquí y en la China, lo demás es solo una masturbación que nos encierra en un metro cuadrado con un árbol, que nos impide ver el bosque y el bosque se llama eliminatoria mundialista Brasil 2014.

Es cierto que es complicado tener que ver la tabla con fría estadística que nos condena a un penúltimo lugar, pero primero pregunto nos merecemos ese lugar, hemos hecho algo por cambiar? Desde hace 20 años vengo escuchando las mismas frases de recambio generacional y trabajo a largo plazo, pero valgan verdades todo sigue igual.

Queremos sacar a Manuel Burga de la Federación Peruana de Fútbol, pero nadie dice esta boca es mía cuando de asumir responsabilidades se trata. Qué fácil es ser crítico de tribuna, pero que complicado es querer asumir la responsabilidad de un cambio, que será doloroso, pero que nos dará victorias en un futuro, y hasta lauros mundialistas.

Ese es un primer punto por demás interesante. Asumir responsabilidades de que deportistas hablamos si los niños viven encerrados en un monitor con un pc, y muchas veces hasta en un iPhone, y cuando los niños juegan a la pelota lo hacen con una plástico y encima el serenazgo los bota del parque con la absurda excusa de cuidar el jardín, entonces para que miércoles queremos un parque, si no lo vamos a usar como se debe?

Sobre las pelotas de plástico habló por lo siguiente cuando Uruguay vino a jugar la eliminatoria para Francia 98 y donde ganamos 2-1, el padre de Álvaro Recoba, ex Inter de Milán y ex mundialista charrua, dijo: “a mi hijo le di pelotas cuero desde pequeño para que se acostumbre a patear como profesional y ahora es todo un grande”.

Vamos a otro punto los colegios en su gran mayoría son casas o casonas viejas acondicionadas y esto es, además el curso de educación física ya no existe o si existe lo limitan a correr sin sentido por una canchita de cemento. Ese no es el verdadero sentido de la “educación” física, la educación física es eso “educación”, para crear un hábito de vida sana, y allí también tiene que ver la alimentación y lo ordenado que podemos llevar una vida, por ello pregunto cuánta gente le dedica media hora del día tan solo a caminar?

Vivimos un país donde la solidaridad ha sido dejada de lado, y donde las familias son cada vez más efímeras, entonces la educación al interior del hogar se deforma creando pandillas, Díganme así  podemos tener la opción de soñar con un mundial?

Yo como peruano sueño con ver a mi país en un mundial, para disfrutar aún más de la fiesta del fútbol, aquella que no debe dejar resaca etílica, sino amistad pura y sincera. Después de todo el fútbol es solo un espejo donde nos vemos como nosotros vivimos y como nosotros nos queremos ver.

Pregunto nos queremos ver lamentándonos para siempre por lo que pudo ser y no fue? Si la respuesta es que buscamos la diferencia entonces hagámoslo viviendo por un ideal, y siguiendo los sueños de infancia de la manos con nuestros padres, hijos, amigos y vecinos, después de todo lo único que dejamos en el mundo cuando nos vamos es un recuerdo amargo o grato para quien compartió un momento con nosotros.

Buenas noches soñadores, hoy su Guardián de Leyenda recuperó su esencia, la de nunca dejar que la desesperanza gané lugar a los sueños de bien.

      

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