¿Por qué esperar lo mejor del mundo?

Bueno llegó la hora de otro post un día antes de ponerme de vuelta en el trabajo, sobre que escribir, pues sobre lo que me pidió mi amada Mei-Ling amor, salud, dinero, comida y juego.

Como todos ustedes saben amo a un bella joven cuatro años menor que yo, descendiente de chinos mazamorreros como yo, y también descendiente de una vieja raza de guerreros emprendedores de la sierra peruana como yo, en su caso de Tarma, y en mi caso de Viraco.

Hablar sobre Mei-Ling es hablar de sueños y realidades, de aventuras y cotidianidad, así como también de pasión, devoción que a fin de cuentas son los ingredientes del amor, puro sincero y demostrado en hechos concretos como abrazos, besos, saludos y caminatas eternas por el camino de la vida cuyo fin solo sabremos cuando nuestro legado sea seguido por nuestros hijos, nietos, bisnietos y tataranietos.

En ese camino solo estaremos acompañados por quienes disfrutan nuestra felicidad y son felices si nosotros somos felices, no niego que en mi vida terrenal tengo errores, aciertos, por que así ato, desato y vuelvo a reencontrarme con un niño soñador que da vuelta a la página siendo feliz con la ilusión más grande de un ser humano, el llegar a un objetivo siendo el ganador en el reto de mi vida.

Ustedes se preguntaran, pero como habla así una persona que hace una semana renegaba de su infancia, y si viví momentos complicados de niño, adolescente y joven sin dirección de vida. Recibí gran ayuda para reencausarme en un camino que había perdido durante años, y que pese a mis frustraciones siempre estuvo allí, tantas veces como yo lo añoraba y quería regresar. Me refiero sin duda a mi vida de periodista, que tal vez no sea perfecta, pero es bienaventurada y ahora bendecida por grandes amigos, compañeros, padres, hermanos, catequista, Mei-Ling y por su supuesto por la persona que da vida al Guardián de este blog: “yo”.

Si me preguntan que es la vida, pues solo debo decir que es un libro, una gran historia que contar con cada noticia, que también por supuesto me puede indignar, aborrecer, detestar, asquear, y rechazar, pero nada de esto valdría la pena si no le doy una cuota de esperanza al mundo, por que esperanza viene de esperar, puesto que aunque se diga que no se debe de esperar nada de nadie, yo si espero que un día un ente de bien, y lleno de luz llamado Dios, atraído por la fe nos den un nuevo ánimo de vida.

Saben porqué? Por que la vida no es una desgracia, no es una carcajada, no es una broma, no es un final definitivo. La vida a mi modo de ver es un laberinto donde encontrar la salida siempre demora, pero esta existe y la vemos pasar a diario, pero no con los ojos del cuerpo, sino con los ojos del corazón.

Así me lo enseñó un tío mío muy querido de origen machagüeño llamado Aníbal, quien  en alguna ocasión me llevó de la mano junto a mi hermano a ver el festival de tunas en Arequipa, cuando había perdido la esperanza de ver tan bello espectáculo allá por 1992, un poco antes o un poco después tal vez.

Este señor siempre honró a su esposa mi tía Jacinta, quien nunca dejó de venir a Lima ante un llamado de mi abuelo Roberto. Esta señora tuvo la paciencia de aguantarme mil y malcriadeces cuando mis padres me dejaban por sus viajes de trabajo.

La misma esperanza que me dio mi tío Eliseo al llegar a Metán en el 2008, esa es la misma esperanza que me dan mis padres cuando un problema me ahorca, y esto nace de la misma fuerza vital de una madre de corazón noble y paciencia gigante como es mi mamá doña Ana María, y esto es lo mismo que me transmite Mei-Ling cada día al recordarla tan inocente y segura de los valores que defiende.

Qué si espero algo de los demás? Si lo espero y no espero dinero o bien material sino paz para resolver los problemas con paciencia y dedicación como Giancarlo, por que este señor de estatura muy pequeña  desafía a la realidad con la fe, de que un día todo se irá arreglar, por que después de todo no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista, por que en el camino de la vida la impureza se va dejando de lado con la luz de la verdad, y el equilibrio que como siempre digo da la experiencia de vida.

Por último hoy se que nunca más mi fe se perderá por que esta al resguardo de mi familia de la cual ya es parte Mei-Ling, y por que lo se por que simplemente los amo a todos, aunque mis momento de cólera guiados por la impotencia he tenido, por que soy humano y mal día nos puede tocar a todos, pero al final la noche es más oscura justo un minuto antes del amanecer.

Saludos soñadores que tengan la mejor noche de todas, y que los sueños refuercen la energía de vida que lleva en la fe, la esperanza de un mañana mejor.