lunes, 18 de junio de 2012

Un adiós con agradecimiento por el pasado y una fe inquebrantable en el futuro


Bueno seguidores de este Guardián de Leyenda a quienes se toman la molestia de leer este blog les quiero agradecer su paciencia y sus disculpas por mis errores. Los cambios en mi vida se iniciaron desde que me reencontré conmigo, alguna vez escribí que para ganarlo todo, también había que dejarlo todo. Eso es precisamente lo que haré en menos de dos meses. No me corro a los retos puesto que donde Vladimir Rendón Acat, ha ganado es donde vino de menos a más, y sin que nadie espere medio de mí. Al final se que con mi triunfo convertido en paz espiritual, y amor familiar saldré ganando mucho más.

Agradezco a todos los que confían en mí, agradezco a los “genios” o “mentes inteligentes que nunca se equivocan” y para variar por tener dos minutos en una redacción ya se leyeron toda la enciclopedia británica o tal vez repasaron Wikipedia, por que nacieron de la mano con la tecnología.

En fin en un tiempo más ya no será mi problema. Mi nuevo problema será demostrarme una vez más a mi mismo, que puedo renacer de las cenizas como un ave fénix.

Ojo no le tengo mala fe a nadie y por el contrario estoy agradecido con quienes se quejaron de mi pues pude ver en que equivoco, en que tengo razón, y en que nunca debo rectificarme puesto que la experiencia de vida me avala mucho más, que cualquier cartón de universidad, que también poseo, pero no hago alarde de él puesto que en el periodismo importa más la sinceridad, los valores en general, y también reconocer con humildad los errores, por que si alguien sabe más que yo he de reconocerlo, pero también este debe tener argumentos para demostrarlo.

No tengo nada que reprochar a mis jefes o superiores actuales ellos se han portado como señores y damas de clase A-1. No tengo nada contra nadie, pero si busco un nuevo reto personal que me lleve a estirarme y a ser el “Súper Vladi” que todo lo puede, tal vez sea la hora de caminar por Lima y buscar más historias para este blog, tal vez sea la hora de pedirle trabajo a quienes nunca imaginé pedírselo, tal vez sea la hora de vivir y trabajar para sentirme mucho más feliz de lo que siento hoy en día y dormir antes de las 11 PM.

Despertarme a las 6 AM, caminar por una Lima que amanece con los canillas y las combis me hará recordar que la vida existe una mañana acompañada de la fría luz de este invierno que comienza.

No tengo miedo a los retos, y no gusta retroceder en la vida, pero hoy necesito pisar la calle para ver cual es la necesidad de un mercado habido de soluciones fáciles para la gente de a píe. Además mejor que me pase ahora antes que me pase ya casado y con hijos, por lo menos ahora se que mi fe está fuerte como un roble, y soy capaz de integrarme al mundo como el mundo se integro hacía a mi.

Gracias amigos, gracias señores que me dieron la oportunidad de ingresar a una empresa de fina estampa y gran tradición, parafraseando a Maradona en su despedida: “la antena sigue vibrando y hermanando un país, que necesita más esperanza y calidez familiar”. Se también que hice grandes amigos y que nunca más estaré solo en el quehacer del periodismo, el oficio con más humanidad y sentimientos de paz.

No soy quien para juzgar a los me critiquen, no soy quien para calificar mi trabajo, pero no me torturaré por que se di todo de mi. Soy un ser humano como ustedes agradecido, y les quiero decir gracias por hacerme parte de una familia que una vez conocí por los relatos de don Alberto Terry Vásquez. Gracias por que con trabajo alimente la leyenda de una canal ganador y que ha llevado a sus hogares la historia del Perú en tiempo real durante más de 50 años.

Aún mi retiro se dará a fin de mes, o un poco más, pero desde ya alisto la despedida agradecido a mil, pero hoy llegó la hora de buscar un nuevo reto, encontrar una nueva historia, y escribir un nuevo capítulo del libro de mi vida. Como dijo Cerati en el Monumental de River: “Gracias Totales”.
 

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