Hola a quien me lea en la noche de hoy otro post desde la
lejana o cercana Lima, capital de Perú. La verdad no se que más contar esta
noche creo que ya toqué todos los temas importantes para mí y por lo cual pude
lavar mi alma de tanto pensamiento de rencor venganza contra los que alguna vez
en el colegio me hicieron daño, así como creo que ya me disculpe mucho con mis padres
y ellos me perdonaron por los años en que lo hice pagar por su indiferencia
ante mi dolor por el maltrato escolar. Eso ese es un tema como curar las
heridas o mejor dicho como no hacerlas sangrar nunca más.
Recuerdo que fue en los últimos meses del verano del 2012 donde pude almorzar con mi hoy amigo y también colega Víctor Robles Sosa, con
él hablé sobre como nació la plaga terrorista en el Perú, y de manera bastante
didáctica me dio una clase magistral de lo que había pasado en mi país. La
verdad todo se resume a una guerra por el poder que en los años 60 y 70 se dio
en el campo ideológico de la post guerra y cuando el mundo era dividido por el
tristemente celebre Muro de Berlín. Qué decirles? Mi país como el de muchos se
vio contagiado por ambiciones sin medida por acumulación de riquezas basadas en
un poder político que solo envenenó y sigue envenenando a muchos hombres y
mujeres desde la niñez.
En el pasado o hasta fines de los 80 la fortuna se definía
por quien evadía más impuestos, y acumulaba más propiedades, hoy la fortuna se
mide por cuánta capacidad tecnológica tiene un grupo de poder para mover el
dinero y hacer caer las bolsas de valores, mediante un frío click de
computadora y es allí a donde quiero llegar hoy todo nuestro mundo gira alrededor
de un Twitter, un mensaje en Facebook o un correo electrónico también llamado
e-mail, por amor a Dios señores es que acaso los abrazos se dan por medio de un
teclado, o vemos el corazón de las personas mirando un monitor, acaso en el
reflejo de la pantalla se puede ver los ojos de una persona para saber si nos
miente? Por qué el futuro de una amistad tiene que girar en Internet.
Internet rompió fronteras y también las creo, no unió con
quienes están lejos, pero nos separó de quienes tenemos al costado en mi caso
de mis mejores amigos. Sabe yo no quiero ir a comer un helado con un iPhone,
tampoco quiero llevarle serenata a mi amada Mei-Ling en un iPhone, para eso
mejor me apoyo en mis amigos de la tuna de la facultad de Medicina-Veterinario
de San Marcos.
Por qué hemos perdido esa emoción de ir al teatro de barrio
y ver una obra infantil que a mi a mis 34 años me sigue fascinando. Recuerdo
que la primea vez que vi el Flautista de Hamelín, fue en un teatro del Rímac o
Pueblo Libre a las 7 años, e ingresé de la mano de mi mamá y la última vez que
fui al teatro fue en la linda AAA del jirón Ica en el Centro Histórico de Lima.
Ahora me preguntarán que tiene que ver el teatro o el uso de
la tecnología con la ambición desmedida por el poder, o el conflicto ideológico
que separó y sigue separando al mundo, la verdad solo me queda una respuesta el
mundo o los que aquí vivimos dejamos de soñar y creer en la buena fe, dejamos
de creer que sí podíamos disfrutar de un buen momento con nuestros padres para
dar paso a los vicios que nos engendran ideas negativas.
Saben yo tengo un compañero de colegio llamado Javier
Robles, y otro Guillermo Carpio a los cuales difícilmente podré llamarlos con
la palabra amigo si los vuelvo encontrar, pero me haría muy bien para mi salud
espiritual abrazarlos y sin mencionar una sola palabra seguir abrazando e irme,
para así limpiar del todo mi alma y olvidarme de rencillas del pasado, por que
después de todo somos humanos que podemos pecar, arrepentirnos y rectificarnos.
Hace unos días escribí en mi Facebook que la pobreza se
lleva en la billetera, y la riqueza en el alma, también trate de impulsar la
idea que el compromiso de otros por la paz, era mi seguridad. Hoy 3/09/2012
solo quiero decirle al mundo que no importa que tanto nos equivocamos, solo
importa que tanto estamos dispuestos a dar lo mejor de nosotros en nuestro que
hacer diario, y que no se diga que así acaban los problemas, por que problemas
van a haber siempre, pero lo que nunca debe falta es la sinceridad.
Buenas noches soñadores un abrazo a todos.
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