Hoy es muy tarde, pero mi necesidad de escribir para dormir
ya es costumbre aunque la verdad no tengo un tema explicito para escribir, tal
vez sea bueno conversar sobre la aventura de mi vida, pero ya de esta he
hablado muchos los que sigan este blog podrán cuales son mis alegrías y
frustraciones, pero hay un tema del cual he contado poco por no decir nada, y
es sobre un camino que llegó a terminar de recorrer, y del cual espero nunca
desviarme, me refiero a mi encuentro con Dios, no con un ser sobre natural que
lo puedo todo, sino con un ser de energía vital que da la emoción para sentir
alegría por las ocurrencias diarias.
Si antes del siglo XX hubiera hablado de Dios pues hubiese
dicho que es un ser omnipotente, así como siempre presente, que a él me debo
para que perdone mis pecados e ir al cielo cuando me toque morir, pero hoy 11
de mayo del 2012 cambió mi concepción de Dios, y es que no he cambiado de
religión por que soy católico, por que creo en el Papa, creo en los valores que
encierra la fe verdadera, creo en la buena voluntad de quienes hacen bien sin
mirar a quien, creo en que un simple mandamiento este mundo sería mejor y este
es: no mentiras.
He de declararme un gran mentiroso en muchas ocasiones, y
ladronzuelo en otras, pero jamás agrediría a otra persona por un simple hecho
de poder. Algunos dicen “soy pobre, pero honrado”, otro hablan por allí que
“más vale el pájaro en mano que volando”, para mí solo vale no mentirme a mi, y
seguir lo que yo considero correcto, pero ojo por seguir esta línea que divide
lo bueno de lo malo, y la locura de la cordura en un hilo tan fino como fuerte,
fui educado desde muy niño.
Que decirles vivo al borde absoluto, sin dejarme caer en el
desequilibrio por una ansiedad que da el equilibro suficiente para mantenerme
ecuánime sobre ese hilo conductor. No soy vengativo aunque alguna vez lo haya
deseado, aunque alguna vez estuve a punto de terminar con mi cordura para darle
rienda suelta a una sed de revanchismo que voy dejando en el pasado, gracias a
un energía que sin duda marca la diferencia de los seres humanos con otros
seres vivos y es el amor de Dios, aquel amor basado en la libertad con el
respeto, y la sensatez para actuar ante un campo minado que se trasluce en el
quehacer diario de cada uno de nosotros con las grandes responsabilidades que
nos da la viva terrenal.
Cuándo me tocó el amor de Dios es una muy buena pregunta,
creo que siempre estuvo allí o no mejor dicho siempre esta allí y la pude ver a
diario desde que nací, que yo halla pensado o imaginado que no estuviese allí
es algo muy diferente, pues algo me cegó para no ver a Dios, así como también
esa misma energía me mostró a Dios, que fue esa energía o donde estuvo todo el
tiempo que no la vi, solía preguntarme y aunque no lo crean esa respuesta la
encontré en viejo mensaje de mi madrina Mabel en mi Hotmail, aquel correo decía
“eres un ángel que se sigue preocupando por el mundo”.
Obviamente no soy un ángel y cabe decir que hace más de un
año no veo a Mabel, pero se que Dios la tiene a buen recaudo, pero saben por
que Dios nunca me dejó solo, es por que él vive dentro mí, así como vive dentro
ti y cuanto ser vivo este bregando sobre la Tierra, es que no debemos entender
a Dios como un hombre, por que nunca la fue, Dios es una energía que nos vida e
ilusión para redefinirnos en nuestro rol para con el mundo en cada momento y
lugar donde estemos.
No se si valga el ejemplo, pero yo lo entendiendo así
primero nacemos y nos apoyamos en manos y piernas para gatear y aprender a
caminar, luego cayéndonos aprendemos a caminar con las dos piernas, más tarde o
necesitamos de un bastón o estamos apoyados por quienes nos aman para seguir
recorriendo el mundo, pero hay quienes nunca pudieron caminar y sin embargo dan
movimiento a un silla de ruedas, pues eso es Dios quien no mueve para gatear,
quien nos enseña a caer para luego caminar, y quien nos da el bastón o nos
rodea de gente buena para seguir avanzando.
Dios no es humano y tampoco extraterrestre, Dios es la voz interior
que nos libra del pecado por nuestras acciones, por que así como tenemos
derecho a equivocarnos para aprender, también tenemos el poder para
rectificarnos cuando nos dimos cuenta tarde o temprano que escogimos el rumbo
equivocado de vida. Dios nos da la vida no para ser perfectos, no para ser 100%
buenos, Dios nos da la vida aprender a vivir con errores y aciertos, para luego
enseñar con el ejemplo.
Dios me dio a mi como a ti la capacidad de soñar, y no
rendirnos, Dios nos dio un sexto sentido para ver y escuchar, sin ojo y oídos,
por que solo así conocemos el corazón ajeno que nos permite entrar y ser
amados, saben cuando descubrí a Dios, cuando recordé que podía pedir disculpas
por mi errores y seguir en el camino de la vida con la frente en alto y en
libertad, por que el mayor pecado del ser humano es negarse a vivir con fe,
esperanza y amor.
Esa es la enseñanza que me dieron mis padres, además de
quienes se cruzaron en mi vida desde bebe hasta mis 34 años de hoy, y es la
posta que tomó Mei-Ling en mi vida, por que con ella sueño, vivo en paz y con
fe, por que en ella encontré el alma noble que nunca dejará y con quien estoy
seguro viviré la alegría y responsabilidad más grande de mi existencia, ser
esposo, papá, y también un día muy lejano abuelo.
Así entiendo yo a Dios, por que equivocado o no, se que Dios
entiende lo que en este post quise decir. Que tengan buen fin de semana,
ustedes los soñadores de la justicia.
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