Escribo esto con la siguiente premisa de comienzo y
arranque: "Si piensas distinto a otro aprende de él o ella, si piensas
igual comparte y si él otro o la otra no piensan simplemente pon primera y
arranca, por que más vale solo que mal acompañado y estar mal acompañado es
estar con alguien que crea que pensar cuesta y duele".
Como todos saben soy de la derecha responsable y solidaria,
pero vengo de una familia de izquierda con nata, pero sin caviar en la mesa. De
hecho le debo la vida a dos obtusos personajes de izquierda nada moderna por
que ni laptop usan, pero si leen un diario a diario, escuchan las noticias al
mediodía, miran cable en la noche y conversan con la almohada de madrugada para
luego volver al ruedo del trabajo pensando en su familia y nada más que su
familia en un lugar que ambos (Roberto y Ana María) construyeron con el nombre
de hogar.
Mi padre me enseño a no fallar, a no equivocarme con su
ejemplo corajudo, igual mi madre que se torna de desesperación cada vez que no
puede cumplir con su palabra. De hecho yo crecí en un lugar donde había deberes
sagrados que cumplir, pero no derechos ganados por nacimiento que hacer
cumplir, es contradictorio ello, por que el no ser leal con mi palabra me ha
llevado no solo a la quiebra absoluta, sino también a no valorar mi propio
trabajo, a desconocer el esfuerzo de mis padres y a sobre todo llorar cuando no
puedo salvar el mundo,
De hecho esto último me llena de intolerancia que no es
positiva, puesto que atrae un totalitarismo castigador conmigo mismo, no puede
ser que un miembro de la derecha solidario y responsable fallé al querer salvar
el mundo, pero tampoco puede ser el resto del mundo piense como yo, en mi afán
de salvar el mundo. De hecho el que exista la izquierda, sirve y mucho para que
la derecha se apoye y viceversa, por que uno sin el otro son partes cojas de
todo llamado por muchos humanidad, esa humanidad que nos lleva a pensar
distinto, cuestionarnos, apoyarnos en la fe y en nuestra comunidad para sacar
adelante a una sociedad que no puede detenerse al primer error, puesto que para
eso existen las soluciones.
En el mundo del siglo XXI la ideología ha renacido, pero no
la lucha de ideales, se ha cogido la bandera de la izquierda y la derecha para
marcar una confrontación con quienes piensan diferente, haciendo que se
extingan los puntos en común para llegar a los acuerdos y tareas por cumplir de
todas las partes. De hecho el comunismo es totalitarista y antidemocrático por
que no permite el libre pensar y la libre empresa haciendo a un Estado mafioso, al estilo Cuba o al tipo de gobierno de Pol Pot en el Asia, el capitalismo
también tiene un punto débil puesto que usa al trabajador como mercancía y
maquinas que no permiten humanidad, así que en los dos lados santos no hay, por
el contrario solo hay gente que hace uso de las buenas artes y las malas artes
para jalar agua a un molino que genera según sea el caso prosperidad con viento
armonioso o tormentas con aluviones incluidos.
Yo imperfecto y con muchos errores que corregir en mi vida,
no me perdono el hecho de no ser igual a mi padre y mi madre que aunque
comunistas obtusos, tienen una dosis de amor traída a ellos por la humanidad
con la que fueron educados por mi abuelos, que por un lado eran cholos viraqueños
a mucha honra señores, además de trabajadores, patriotas y tan honrados como
generosos, tal cual los otros abuelos que eran chinos y austriacos llegados
Huaral, por ello en mi casa nunca falta la mandarina y el queso traído de
Arequipa, de cuando en cuando se comparte pan tres cachetes y un goulash con
papa huayro en mi mesa, una mesa a la que llamo hogar cada vez que mi nana
Dorita llama al almuerzo y cada vez que un Eusebio (a quien extraño mucho) me
ponía pan con palta sobre la mesa del lonche, la misma mesa donde mi hermano
come un arroz chaufa una vez por semana y yo no puedo devolver por gracia
propia ya que de chamba sigo busca.
Los amo papá, mamá y a ti Robertito gracias por darme un
hogar donde llegar.
PD: El día que pueda ser tal cual como mi padre y mi madre
podré perdonarme a mi, pero eso si derecha solidaria y responsable siempre
seré.
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