Hay dos cosas que levantan a un territorio lo vuelven país, luego nación y luego Estado prospero: el espíritu emprendedor y el espíritu cooperante, la única manera de predicarlo es con el ejemplo. Los que estén fuera de esos conceptos se excluyen solos y se encierran en la memoria de un pasado sin fe en un futuro que es mañana y que es mejor que ayer.
PD: A todo esto recuerda es mejor dejar el pasado, muy atrás donde no se vea ni con espejos retrovisor.
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