Aclaro que
el Perú como territorio es del primer mundo, puesto que aquí se mezclan la gran
mayoría de faunas y floras existentes en el planeta. Tenemos desde una selva
rica donde un río llamado Amazonas riega de felicidad a los habitantes charapas
con un baile de tecnocumbia, hasta una costa ingrata consigo misma porque que
solo el mar Pacífico puede dar alimento a todos los niños del Perú, pero esto
imposible entender para un burócrata es, ya que restringe la pesca pensando en
el cuidado del recurso antes que en uso racional, además contamos con una
sierra que solo en turismo, ecoturismo, turismo de aventura, minería, ganadería
y agricultura daría trabajo de sobra a los más de 30 millones que hoy somos por
miles de generaciones venideras, más los inmigrantes que nunca han de faltar.
Ahora bien
por qué somos tercermundistas? La respuesta la encuentro en Facebook y en mi
intolerancia con joda del otro lado incluida, el sábado catalogué a la
izquierda de terrorista y a mi por fujimorista confeso me catalogaron de
corrupto, esto pasó con un señor Manuel Sierra que ni conozco en mi oficio en
mi beneficio, solo que en las redes sociales sino tienes correa pierdes en ira
y en intolerancia más, aunque la reflexión queda allí para ser acomodada,
puesto hubo un tema que me parece atañe al señor Manuel Sierra como a mi, ya
que ni nos hemos visto en tribuna futbolera y nos etiquetamos como si
tuviéramos una vida juntos.
Es que los
peruanos nos tomamos todo de manera personal, muchas veces no entendemos que la
persona del costado tiene su respeto, su amor propio e ideas aprendidas en su
vida que se deben de respetar, sin perder el respeto propio. Cuando
personalizamos el problema perdemos todos.
Hace unos
días un buen abogado de apellido Mori y de nombre Mario Manuel, me aclaró que
en mi nombre de mi idealismo no podía centrarme en una sola persona para
entramparme en mi vida personal y profesional.
Simplemente
el doctor Mario Manuel me dijo: “no puedes personalizar, además siempre tienes
que pensar con inteligencia emocional. Todas las personas perciben diferente a
ti y tú diferente a ellos, cautela es la clave en la vida”. Que buena lección recibí y saben cuesta
aprenderla e interpretarla para uno mismo.
Si el señor
Manuel Sierra lee esto le quiero expresar mis agradecimientos por que gracias a
él recordé que en la vida como en el fútbol, él que no sabe recibir patada
pierde y no pierde un partido sino su elegancia para saber recibir y esquivar
una “chiquita”, a las cuales estamos expuestos siempre, pero allí la clave para
salir airoso con habilidad y no con fuerza, que refuerzan los dolores del lado
espiritual.
Como
colofón por que ya enredé la idea quiero decir que los peruanos somos
tercermundistas por que creemos que las personas son el problema y el problema
no son las personas el problema es como interpretamos e interiorizamos las
ideas de otros para con nosotros, es decir como dicen en el libro los Cuatro
Acuerdos del mexicanos José Manuel Ruiz, no tomes nada a personal, eso a la
larga te genera molestias a ti más al otro, te genera malos ratos y tan malos
entendidos que hasta pierdes la chamba por un idealismo positivo, pero negativo
cuando crees que el otro es tú enemigo por pensar diferente.
La vida
como en la película del Padrino tienes que tomarla como un negocio y sin nada
personal es una lección que me dejó NS (mil gracias jefe), cuando me despedí de
él para verlo cuando entendiese el mensaje, espero haberlo interiorizado ahora
y gracias a Manuel Sierra (a quien no conozco personalmente) y al doctor Mori
que me dedicó minutos que hoy con cariño agradezco.
Me doy
cuenta que mi rival a vencer no es el desempleo en si, es mi intolerancia y
poca paciencia para tomar todo como de quien viene y sin nada personal de por
medio para conmigo.
Buenas
noches soñadores de la justicia. Es un momento para meditar por que escribí tan
enredado este post.
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