domingo, 30 de agosto de 2015

La fe avanza y no espera

Amigos todos, cuando crean que estoy caído o me desaparezco por un tiempo o he recaído, no es así, solo que reflexiono, como darles lo mejor de mi..Los periodistas sufrimos de un problema "sin cura", por que al abogado su error se lo encierran, al médico se lo entierran, mientras que a nosotros, nos lo publican..., pero aún así más que trabajadores de papel y lápiz, somos quienes en la hora más oscura vemos el amanecer de la verdad, no me arrepiento de ser periodista, pero si me arrepiento de no haber dicho lo que pienso (aunque por ello se resten amistades)...Los quiero, no los dejo, por que siempre estoy a un mensaje de distancia...Saludos, Vladimir, el niño que no quiso seguir los pasos de Peter Pan, por que contra viento y marea, yo si logré crecer un paso, más que ayer...Buen lunes soñadores, es día lentejas...

La fe avanza y no espera

Espera lo mejor y adaptarte a lo que tienes te hará una maravilla para resolver el más fuerte de los problemas absorber los problemas para volverlos en tolerancia, paciencia, fe, acción, determinación y salir adelante ante la adversidad...No pedí quedarme sin trabajo, más de diez veces, pero 11 veces pedí llegar a un lugar al cual llamar hogar y ahora logré ese primer peldaño, nadie dijo que sería una fórmula matemática escrita en Baldor, pero a su vez nadie me impide escribir mi propia fórmula...El problema de cada día es no perder la esperanza y aunque me hayan dado con palo por creer en que como cómic podía avanzar hacía mis sueños, solo me demostraron que con una mentira no me retenerian...Soñadores de la Justicia que el mundo conozca el mayor poder que el universo les concedió, la voluntad de no ser superados por la realidad del mañana...avancemos Soñadores, hemos llegado para no ir hacía atrás.

PD: Humanidad y no santidad en lugar terrenal...

sábado, 29 de agosto de 2015

¿Quién va al psiquiatra?, yo y no jodan

Soñadores de la Justicia, buenas noches, quienes no sé, escribir para no perder el training y no la costumbre. El titular referente al psiquiatra es porque estoy harto de escuchar, en la “flaca pantalla boba” (por que caja desde antes de los tv plasma dejo de ser), la frase, repetida por mi madre, desde mis 6 años: “Llévalo al psiquiatra”…, disculpen la frase, pero por la PTM, como joden, con esa palabra o mejor dicho ciencia que explora la psiquis del ser humano y hasta de los animales y plantas.

Bueno quitemos la farándula de la palabra “psiquiatra”, refirámonos por un momento a la salud mental, la primigenia del ser humano, de donde nace nuestro génesis, que nos opaca en un momento de dureza social, pero no nos define, cuando separamos la hierba mala, del bosque…Señores ir al psiquiatra, psicólogo o conversar con un terapeuta o simplemente hablar con un cura u orar para estar con Dios, es tan normal, como cuidar, lo que comemos.

Si debo referirme a la salud mental, hay que señalar lo que me dice don Jorge un buen compañero de labores, que se vuelve cada vez más mi amigo por adicción, pero que dice don Jorge de Chalaco y Maretazo: “Los locos y los niños dicen la verdad o dicen lo que sienten” (su verdad, puede ser).
Así por eso a los locos se les encierra o se les exilia y a los niños con correa los castigan, es así pues, por eso definamos, ¿Quiénes son los locos?, ¿Quién define la salud mental?, usted que estudió cualquier otra carrera menos medicina, usted que juzga por una sola mirada, lo cual es firmar un contrato sin leer las letras “pequeñitas”, de la ley hecha la trampa que ponen los bancos (todos), usted que convive con el susodicho paciente o la persona que por iniciativa propia, busca un apoyo emocional en un profesional que estudió, no solo medicina sino psiquiatría, como especialidad, para sostener al ser humano, en donde es su lugar más delicado de nuestra humanidad: “La Mente”, pero que es la mente y qué hay adentro de nosotros?
Buena pregunta, para esta noche semi-fría o semi-caliente, de pre Fenómeno El Niño. 

Disculpen otra vez, pero ¡Carajo!, no jodan ir al psiquiatra es tan importante, como para los fieles católicos ir a misa o tomar dos litros de agua al día…ya no digo o aunque sí, ir al psiquiatra debe ser parte de los exámenes médicos que nos hacemos de manera anual.

Finalmente, la salud es parte de la calidad de vida, ojo nadie vive para siempre, pero la salud mental, es un tema cliché que se te estampa para siempre en la familia, porque a muchos en diversos ámbitos, se nos recuerda como locos, después de calificarnos, etiquetarnos o exiliarnos.

No sé, si cabe decirlo tengo 37 años y sueños que desde los 20 no los cumplo, ahora con un apoyo emocional de una persona declarada agnóstica y que valgan verdades me conoce, poco y mucho, me abrió un espacio para la salud mental o mejor dicho emocional, me alejo de una avenida que se ha volvió un estorbo en mi ser (aquella que conecta desde Miraflores hasta Santa Beatriz) y luego me dedico espacios de confianza, con un buen ojo y palabra de Pardo que, con rigurosidad escolar, me da un paso de fe…


De hecho, la salud mental es un tema más complejo y delicado que un post, incluso, me dirán que no, pero el calor extremo, la falta comer pescado, la falta de una Inca Cola, cada dos días y la ausencia de un padre, son tan letales como los gritos de tu madre, no ir al masajista, no caminar por la noche o no escuchar tu radio de música-consejos, al despertar. Ese lugar lo ocupa un noticiero sacado de la Tinta Roja de Fuguet…Así es aprendí en Chile al costado de una preciosa mamá chilena, a quien le debo un pasaje a Lima, lo importante que era ser uno mismo, con el silencio y la compañía, aprendí a valorar la familia en un Metan, donde estuve conectado a la distancia y donde extraño a un tío que por todas las cosas respeta a su Arequipa, a su Viraco y a mis primos Cristina y Luis, no es que añore Argentina, de hecho más añoro, saber que al lugar que vaya, el mejor médico sea quien esté dispuesto a escucharme…Si de escucharme debo, pues quiero decirlo el Callao, puerto de noticia roja es el lugar idóneo para recuperar la fe, en un calle que no lleva el nombre de Teatro, pero donde un Abraham me hizo sentir pocos meses, parte de su familia y si de familia habló, pues está Mei Ling y como para sorprenderme, con un mensaje de Inbox-Face, una prima de nombre Vanessa, que se ha portada como prima, cuya familia me adoptó como sobrino, sin pensarlo y sintiendo lo que era saber que es ser parte de un lugar para disfrutar vivir…No me complico, aunque este posteo se hizo largo, la salud mental, es un tema del cual, mi amigo Orlando, sabe y trabaja, es un tema que incluye el cine, incluye a la novia y no a la polola, es un tema donde conoces a tus amigos, por como lo dicen y por cómo te miran y por último es un tema tuyo, cuando aceptaste que era débil al esquivarlo y eras fuerte para buscar ayuda y llevarte adelante, por Dios, el primer psiquiatra es Dios y cuál es la primera pastilla no adictiva, recuerdan un speech, que reza: “En nombre del padre, del hijo y del espíritu santo”, sería bueno contar la historia desde aquellos días en que Jesús, liberó las almas y no las deudas de crédito, lo demás, es solo infectar la herida, con terquedad y farándula lorcha, aquella que nos acompaña en cada almuerzo, pulcro y nada santo del misterio de los últimos. 

Mejor no jodán, vayan al psiquiatra y caminen por La Punta…o sino vean Ghotam.., pero si trabajas en prensa, no lo hables, por que sino te botan..., saludo pptio

miércoles, 26 de agosto de 2015

Un pensamiento para irme a dormir

Dicen las leyendas urbanas que amores puros son los que dan a la mujer y el hombre un hogar y lugar de resguardo imperial en el corazón de cada uno de nosotros, donde seamos capaces de decirnos la verdad sin tapujos, con perdón, pero amores con veneno de cobra son los que traspasan los sueños y congelan el sol de ardiente de nuestro interior, es así que en cada juventud de amanecida fantasía existe un fantasma con la magia de hacernos dudar si el hogar que formamos es verdadero y mientras ese hielo nos detiene, la duda nos consume hasta que la verdad de nuestro interior sale a relucir, diciéndonos quienes somos, caminando como Dante por los círculos del infierno de la mano de su amada, Beatriz a quien debió haber seguida a ciegas, con un alma sola que busca el amor, donde otro se os negaron a compartir la alegría de una sonrisa, con la caricia suave de quien llamaste esposa en el andar de la luna, remando hacía el amanecer como horizonte, en su sitio, donde el deseo carnal, nunca fue más fuerte que el hogar con la familia...Dedicado...a ese amor desconocido, que nunca volveré a ver en un febrero de aniversario...a puestas de una ventana con espejo que atrás reflejó quien eres en realidad, loma bella y linda sin lugar para el deseo actual..., pero solo dime una verdad, por que mentiste al decirme; te amé y me negué, por siempre hasta en soledad, las palabras en un arrebato y a solas de cuatro paredes dijeron la verdad, que te amé, sin medida, pero el corazón de una reina no será para el jinete plebeyo, que a pluma de trovador, vio el amanecer en un oriente de paz...(Solo un pensamiento para irme a dormir).

domingo, 23 de agosto de 2015

Perú a luz de la noche: Bonzai y Jazmín


Buen domingo Soñadores de la Justicia, es un día gris en Lima, muy típico en esta época del año…Si no conoces Perú, te diré que si no pasas por Lima, no sabrás que significa la “Cultura Chicha”, que empezó con las combis de los 90, que dio paso a una nueva ciudad, un lugar donde informalidad creó la clase emergente, los nuevos ricos como diría “Claudia Dammert” (ojo no tengo nada contra la izquierda al rememorar su frase), pero es verdad la informalidad abrió mercados, formalizó las AFP, decayó los sistemas estatales de protección social, por eso murió IPSS (Instituto Peruano de Seguridad Social) y nació EsSalud (al que siempre da la impresión que quieren desmantelar).

Por favor en este tema dejen de “tirar pato” (forma de culpabilizar) a los fujimoristas, que fueron a fin de cuentas quienes clavaron la inyección, pero luego ni Toledo, ni García, ni Humala dieron el post operatorio, es el Perú señores no es Sur corea, no es Estados Unidos, no es Bélgica, nuestras universidades no son Stanford o Harvard, somos Perú señores, como escuché a un señor una vez decir: “A los que han venido a aprender bien, pero a los extranjeros que quieren vender mal, son unos huachafos, porque en el Perú, somos peruanos”, quien dijo esto se llama Nicolai… aunque no diré el evento o nombre de la institución.

Y es cierto en el Perú, somos peruanos, pero según diría un gran señor de apellidos Palma Lombardi y de nombre Roberto, “no se guíen por los Homo Geneflexus”, los hombres de rodillas o en buen samaritano.

Quienes no quieren pensar, imaginar un Perú, que vaya de acuerdo a su idiosincrasia cambiante, es un tema más que política, de sentido común, hoy en esta parte del mundo copiamos, todo y más rápido que en China o Taiwan, no jodan hasta Singapur tiene diferencias en sus ojos.

El Perú, es un lugar donde se rompen fronteras, por eso existen los Gonzales y los Maldini, y no vayan a Las Lomas, “akisito nomás”, caminen desde el grifo de la esquina de la Alameda del Corregidor, hasta Molicentro y verán las tonalidades de un país que con la construcción se desordenó, tanto o más que con la migración de los 70 para adelante…Es verdad cuando los cubanos dicen que su población está en Miami y su ron en Francia, pero también es verdad que los peruanos preferimos Mc Donald, en payaso o hamburguesa, antes que a Cucharita o quinua negra a lo chifado, estamos en un lugar de tradiciones “copy page” y de añoranzas de los fuimos, sin trabajar por lo que queremos, es así Perú o me equivoco? Digo yo, digo yo, digo yo, como sonaba la canción de la década del 90 bailada en el Pub de Los Olivos de la avenida Paz Soldán en San Isidro, es así Perú un lugar de ejes, con series de fabricación japoneses, hechos con mineral de Marcona.

Si hablara del Perú en función al futuro, rememoraría la película donde Michael J. Fox, manejada un auto al pasado, para Volver a Futuro (Back to the Future), es así el Perú un lugar al que tratamos como robot de pilas National, donde jalamos un botón rojo para encender o apagar.

Me refiero a ello porque los peruanos, prendemos el pasado y apagamos el futuro, puesto que aquí el presente, es un circulo de jardín de flores de siete colores, al estilo Angie, “niña de las flores”, que solo podía contar un perro, un gato y un jardinero, descubrir el reino donde estaba destinada a vivir.

Es por ello, que con el tiempo el pasado es un "Bonzai" de un bosque, donde no seguimos la fragancia de “Jazmín”, que nos guía como el amor, nos da la señal de familia.


martes, 18 de agosto de 2015

Dios es psiquiatra, Jesús incomprendido

Definitivamente la salud mental es la base de toda sociedad que se digne decir que es del primer mundo (a mi opinión). Es cierto que el Perú no es una panacea, tampoco es una caída de agua oscura, pero no sabemos que nos depara el presente inmediato.

Sí, el presente inmediato aquel que se da cada amanecer o cuando el sol sale al cantar de la alarma de un celular, es que es cierto hoy (en el 2015), nadie espera que cante el gallo, como lo hacía mi abuelo Roberto, que se solo llego a tercero de media y a orgulloso policía, padre de un ingeniero, dos abogados y tres profesores.

De hecho conviví con Roberto Rendón Zuñiga, desde mis 6 o 7 años, hasta un año después de terminar la universidad (2001) y cuando trabajo no tenía, la frustración me jalaba, nadie me hablaba y a nadie escuchaba (o tal vez escuchaba los recuerdos de Serie Rosa en la Plaza San Martín a la 1 de la madrugada, cuando me decían aprista-fujimorista y sobrino de don Vlady).

Es cierto, no era un vago pues buscaba oficio, como un ahogado busca tierra en medio de tiburones, con barcos piratas que te salvaban para bañarte en aceite, jodido estaba y caminando por una ciudad donde horizonte, más allá del segundo no existía.

Orate, me hubiera dicho mi abuelo (quien con tercero de media, usaba el diccionario como su hijo profesor de universidad francesa). Roberto (el abuelo o el papá Roberto), era un hombre sencillo, tenía la pensión de Policía que bolsiqueaba (una vez por mes), y la del seguro con la cual se compró la primera cuna de don Roberto (papá), que sirvió para Roberto (hijo), un 14 de enero de 1975 desde entonces mi mamá Ana María, recibió por él (mi abuelo) el sobrenombre de hija…pero qué tiene que ver todo esto con 
Dios y Jesús, además de la psiquiatría, bastante creo yo.

Don Roberto, usaba un diablo para arreglar mis zapatillas Splendor compradas en Polvos Rosados y pagadas en dos partes en 1988, luego de ser soldado y policía fundó una tienda en la Calle Nueva de la Ciudad Arequipa (no es cherry para libro de mi tío Jorge, aviso), en la tienda según contaba don Luis Rendón que tuvo 12 hijos y quería ir al norte del Perú a pelear con huaraca en mano, contra el “mono ecuatoriano” (este es un solo decir que se quedó en mi país después del conflicto de los 40 o 50, no te piques hincha de Emelec o Nacional, menos de Deportivo Quito en Casablanca), nada volvamos al mapa como decía Belaunde.

En la tienda de la Calle Nueva, no faltaba un rosario, con velas misioneras, si bien es cierto Roberto con Serafina (mi abuela), se casaron en una boda religiosa que nadie vio, es cierto que don Roberto ya sea en el barrio de Ingeniera, en el de Higuereta, el de Viraco o la Calle Nueva a misa nunca dejó de ir…Nunca entendí entre mis 7 y 24 años, por qué don Roberto, se percinaba cada noche, para literalmente el Santo Rosario rezar, de hecho don Roberto tenía la frase clásica de mi hogar: “Hay señor de mi tierra, donde estas que este no me comprende”.

Don Roberto, era querido y a la vez no sabía muy bien, que lo hacia diferente al resto de sus hermanos, de hecho don Roberto, era una isla de historia que nunca me puse a leer, contaba, multiplicaba, dividía, sumaba y restaba con los diez dedos de sus manos, las cuales juntaba para rezar cuando yo Tieta veía, luego Natacha y antes de estas dos, El Hombre que debe Morir, gracioso por que el compañero de mi abuelo luego de mi abuela, sus hijos y sus nietos (menos yo), era Trampolín de Ferrando, con Risas y Salsas, en horario de circuito sabatino de Panamericana, pues si Dios existe tiene un símil con, con el televisor siempre está presente, siempre en tu hogar no falta, en aquellos años a la familia juntaba, tal como Dios lo podría haber hecho, antes de los días de radio y por supuesto mucho antes de la tv.


Dios es un psiquiatra con el cual uno se identifica (como me pasaba a mi con Mil Oficios, cuando sin chamba me ahogaba), Dios te da una receta, el psiquiatra, también te da una receta, pero lo mejor el psiquiatra conecta contigo, te enfoca, te muestra en una gráfica tu vida, tus errores y tus valores, te lleva de la mano con la psiquis hacía el lugar donde apuntas a estar, es una catarsis, como la que hace Dios, cuando en oraciones, misas o hablando con el padre de la parroquia más cercana te conecta con la realidad y si de Jesús hablamos, creo que lo dejamos, para mañana, a la misma hora, en el mismo canal, por que a final de cuentas, la salud es un tema de estado de ánimo, esperanza, salud mental donde el cuerpo sano lo manda, cuantas inca colas menos o hierbas luisas, más tomamos cada día…hasta la próxima Soñadores de la Justicia.

PD: Dedicado a E.B (Escritor de 15 Cuentos de Largas Noches), gracias por la esperanza, dada.

viernes, 14 de agosto de 2015

Noches Blancas: apagones, terroristas y rateros


Eran noches de apagones, terroristas y rateros, era un lugar de nombre Lima y de apellido Perú, no sé decir si hablamos de una guerra o si hablamos de bombas escogidas con objetivos al azar, pero si es una Lima que el tiempo dejó estar en una calma anestesiada, que por el desorden, el bullicio y las ratas de la alta y la baja volverán a desatar.

Lima es una ciudad de raros extremos y de transformaciones paulatinas. Aunque Ricardo Arjona, no es peruano una de sus canciones tiene un punto donde describe a Lima en sus lados: “Si el norte fuera el sur, sería la misma porquería”…Si esa es Lima, donde la “suerte de la fea, la bonita la desea”, pero también vamos en viceversa.

Crecí en los 80 con apagones que dieron origen una generación que llaman perdida, con amanecidas de 90 kilos, hoy en día, donde el caldo de gallina, con el lomo saltado dejó de absorber la cebada chelera, para calmar el hambre de amanecidas de trabajo y de un horario tan estresante, como un 24 x 24 o una 4 x 4, pasan en las dos vías expresas de la ciudad, donde la luz termina para que ambulantes invadan las calles de donde alguna vez un “Gordo” alcalde Andrade los sacó, pero no dejaron los alrededores que se tornaron callejones, con dormitorios al aire libre y sitios, donde si entrabas, salías con la suerte de que el choro (ladrón) estaba, tan pasado de “pastel”, que no se paró a pedirte un sol y clonarte la tarjeta.

Si es Lima, vestida de gris vistazos de sol y paso de jardines que hoy en día son albergues de tierra, perros y hambruna donde un hueso, marca la diferencia entre comida de niños, compartidas por padres y mascotas, no hablo del cono norte, puesto aquí al lado de San Borja y Surco, se puede ver la misma miseria que en un alto lugar de Puno, donde el aguardiente de noche, te permite emborracharte para vivir.

Pero no todo, tiene color de un hoyo, sin retorno, allí está el sentido de la fe, de quienes duermen como ricos y comen con la caridad del buen samaritano, quieren un ejemplo vayan al Convento de los Descalzos entonces, o la Casa de los Petizos, del jirón Conde de Superunda.

Es una Lima, llena de leyendas urbanas y de fantasmas que avanzan al paso de combi o custer, si antes en mis días de niño era el Enatru, ahora es el mirar un bus azul que sobre cargado de gente al estilo rebaño, mirando realidades de distintas clases sociales, donde el ahogo del dinero, se vuelve un arrojo al crédito y al final nos hacen creer ricos, con costumbres de pobre.

Es Lima, donde lo único que no cambia, es el pasado que se torna futuro, en distinto empaque de video, porque si antes era el Betamax, luego el VHS, el VCV, el DVD, el Blue Ray y ahora el Netflix, mañana seremos solo un punto de pixeles, en un computador, donde la realidad virtual es un salto al vacío, que no apoyaremos, pero al cual nos inclinaremos en un solo concepto de ser humano: la sobrevivencia de nuestra especie…


PD: Dedicado a todo aventurero errante, de Lima la Horrible, descrita por Sebastián Salazar Bondy…

jueves, 13 de agosto de 2015

Sabiduría de la paciencia en la fe de Dios


Dios pone a prueba la fe de los hombres en los pequeños grandes retos. No me derrotaron, al contrario solo me están dando un trunco, para saber que tan fuerte puede ser mi paciencia en combinación con mi ingenio. En la Biblia Hebrea se dice: "El que crea en mi no debe tener miedo"...Así lo fue en el último reto de Indiana Jones y la última cruzada...1988...Harrinson Ford, ya quiero verte de Han Solo otra vez. "Solo el hombre creyente pasará".

martes, 4 de agosto de 2015

Luzmila Koch Prattes el año luego que te fuiste: Memé y Tatá

Doña Luzmila, mi abuela, la mamá de mi mamá e hija de Agnes Prattes, se fue al cielo hace poco más de un año, el 11 de agosto del 2014 exactamente un mes antes de mi cumpleaños, siempre pensé que el onomástico de mi Memé, era el 24 de septiembre, pero el día en que la dejamos en un campo a reposar, me enteré que nació un 16 de septiembre y que 24 fue el día de su bautizo.

Era Memé, era mi abuela, era la Tata de Luciana y Daniel (mis primos hermanos por parte de mamá), si los dos últimos nietos de doña Luzmila, como le decía la mamá de Melissa que vivía en el tercer piso de la cuadra cinco de General Garzón, esa señora que alardeaba que su hija estudiara en el Regina Pacis, de Monterrico y que decía “a mi hija le compro zapatillas de 200 dólares, con tal de que estudie”…

Mi abuela, mi Memé, como le puso Roberto (mi hermano mayor), era peinadora y enfermera, ambos oficios, eran por autodidacta, no estudió sino hasta la secundaria y luego a la chacra, donde se hizo mujer, hacía la chamba de 4 o cinco personas en el viejo Huaral de la Esperanza Baja, allí donde conoció a don Rosendo (su esposo y mi abuelo).

Ella fue no una terratiente, sino tenía amor por lo natural y una fe que hasta antes de mudarse donde mi tía Lucy, la hacía ir a la misa de 10 en “la María Auxiliadora”, allí en plena Brasil, donde al Gordo que me vendía “Chistes”, hoy cómics de Batman vs. Drácula, luego arriba la acompañó. 

Es raro recordar a mi abuela, sin pensar en su fe católica, es raro recordarla no diciendo que si la gente dice que “es verde, entonces verde es para que discutir”. Ella votó por Vargas Llosa el 90 y nunca por Fujimori, en cambio mi mamá fue contreras, votó por Fujimori todas las veces, menos en la primera vuelta del 90 y del 2000. El 90 marcó las dos banderas de Izquierda Unida (que dicho sea de paso, de “unida” solo tuvo el nombre).

Mi abuela no era política, no era judía, pero parecía “gringa”, refugiada del holocausto, ella decía que nunca había escuchado de otra familia Koch, en Perú, pero la primera elección que me tocó vivir en 1998, cuando de “mono” (como dice mi papá),me metí de personero de Luis de Bedoya de Vivanco en Miraflores, conocí a un señor Koch, que debió haber tenido cinco años, menos que mi abuela en dicha época. 

La historia de los Koch Prattes, se remonta a una época donde en Europa había hambruna y ellos se colaron al primer barco que pudieron para llegar a la América que hoy conocemos, de nacimiento era austriaca o tal vez del Imperio Austro-Húngaro, pero no sé ese gentilicio.

Tenía un alma diferente mi abuela, yo nací oscuro y chueco, tanto así que mi tío Carlos (Acat Koch), solo quería corregirme a “cachetadones”, como él decía al píe de un reloj que yo quiero como herencia. Aquel Carlos llegada a las 11 de la PM (mismo programa de Raúl Romero en Canal A) a la casa de Jesús María. Siempre decía “aquí siempre un huevo que comer”, allí en la cocina a gas y al costado de la ventana que daba a un jardín que desde el segundo piso mi abuela regaba, se freía el huevo, porque era o es lo único que sabía o sabe cocinar. 

Una vez me dijo mientras escribía en un computador medio-moderno 386 (de 1996 en mi ciclo segundo de la Universidad San Martín en la cuadra 18 de la Brasil): “Mi “sobrinita, tiene de Koch y tiene de Cuan, también de Prattes, sino no sería tan jodido como el Héctor, de mi primo (que en paz descanse dicho sea de paso un Koch Dávila)”…

No sé tanto de la familia de mi Memé, no sé por que Roberto le dijo Memé en lugar de abuela, no sé por que a Luciana no se le pudo ocurrir un sobrenombre menos “popular y manoseado”, que el de Tata, pero la verdad es una todos los Koch descendientes de Prattes, de una u otra manera, pasaron por la cuadra cinco de Garzón, departamento 201, donde mi papá una Navidad en la puerta del edificio, la PTM me sacó, por que nunca entendió que como descendiente de una raza muy mezclada, no podía ser igual a ninguno de los anteriores de atrás de mi. 

Pero Memé veía, siempre darme una herencia, que se asegurase, no vendería, es por eso que 8 o 9 meses antes de irse (el 2013) un rosario blanco, me dejó, para limpiase el alma impura que mi mente, arrasó (ese día me dijo fue que dicha cruz, fue bendecida y llevada a ella desde Roma).

Te, extrañamos: Tatá, Memé, abuela, tía Mila y Luzmilia, para Rosendo señor, pero para mi mamá (Ana María Acat Koch), siempre era “hay mamá”…periódico, para este domingo allí, nomás.


  

domingo, 2 de agosto de 2015

En Lima no hay llovizna: “Triángulo Paramonga”

Buenas noches Soñadores de la Justicia, hoy es un día o mejor dicho una noche de invierno atípico, poca lluvia y más calor, es una Lima mutante, que cambia como la veleta del viento, es un tiempo de Fenómeno de El Niño, es un tiempo de calor a media mañana y gris de piel de rata por la tarde, es una Lima donde el verano y el invierno confunden horarios, es así mi ciudad que quiero cambiarla, pero la fuerza de la realidad la marca la fiel indiferencia.

Allá por la Argentina y la Colonial (avenidas industriales del Cercado) hay un señor en una calle de medio transversal, me saluda con el grito: “Paramonga, el triángulo Paramonga” a cada galleta de a china (cincuenta centavos de sol) que le dejo al caminar de regreso a la redacción al terminar el almuerzo, no sé su nombre, solo sé que en feriados de fiestas patrias, no lo vi, pensé que se había ido arriba, en sentido contrario de la lluvia, pero la verdad es que al termino de la fiesta regreso a ese dormitorio que está aire libre, hecho por piedras, con colchón de tierra, almohada de esponja, recogida de no sé donde y frazada que me dice un emolientero, fue obsequiada, por un dueño de un hotel que cerró para darle pasó a un edificio de taller de confección.

Tal vez usted, piense me refiero a un indigente más de Lima, pero no es así, sin saber su nombre solo sé al verlo que es un hombre feliz, almuerza según cuanto tiene, al caer el sol escucha gritar un gol de la canchita del frente, no se queda sin música un fin de semana, por la juerga de los carros que al costado de su recamara suite se estacionan, es un señor que me dice lo llame amigo, es un señor que me habla dos palabras estando siempre una silaba delante de mi.


Si hoy en Lima es invierno, gracias a Dios sale el sol y no llueve, no sé que piense ahora usted, pero no hablo de un indigente, hablo de una persona que solo es feliz, que no conoce de elecciones o DNI, solo cuenta, solo cuenta varios tubos de vidrio recogidos de algún lugar, solo desaparece del mapa en feriado y luego retorna para decir a viva voz al verme pasar: “Paramonga, triángulo Paramonga”, es que “monga” debe ser la vida, que le dio a Lima verano en invierno y hoy no llueve para felicidad de quien hizo de un lugar, en la urbanización Roma, de la Lima conocí al revés del tiempo que me quiso llevar a saber, que vivo más allá de una frontera, donde siempre él está a esperar para gritar: “Paramonga, triángulo Paramonga”, a usted señor.