jueves, 28 de noviembre de 2013

Por que no he de ser infiel contigo Mei Ling

Con el pasar de los días me doy cuenta que el matrimonio es el lugar al cual quiero llegar con una persona especial que me dio vida en medio de un lugar llamado desierto sin abrazos y besos en el camino, hoy me doy cuenta que Mei Ling es la mujer de mis sueños y de mi realidad, pero también he de decir que el amar a Mei Ling no me impide tener amigas y compartir conversaciones, sentimientos sin malicia o codicia así como vea atrás y me doy cuenta que la infidelidad es la opción de un patan que de manera egoísta no quiere compartir su corazón con quienes ante el público vidente escogiste amar. Así como también puedo definir el divorcio como un punto de llegada a donde fuiste por que solo diversión quisiste en un baile con barril de cerveza quisiste llamado boda pomposa. Pero a ello hay que agregar que besar y abrazar a tus seres queridos (hombres y mujeres) estando en santo matrimonio es una alegría que no te puedes negar, pero ojo la infidelidad no solo es ir a la cama, sino también es robarle el tiempo y el amor con paciencia a quien te hace feliz dejando de pensar en si para unirse como familia ante el Dios que no podemos engañar. El amar y el vivir en matrimonio es entonces para mi el lugar donde mi cosmovisión de vida me dio la oportunidad de llegar sin dejar de lado a quienes me dieron el si de un sentimiento llamado vida y solidaridad contigo al estar dentro de mi.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Derechista, izquierdista y católico hasta que....

Soy de derecha hasta que con mis derechos no se meta, soy comunista hasta que con mi dinero no se haga asistencialismo electoral, soy católico o creyente en Dios hasta que en la puerta de San Pedro alguien me diga lo contrario y me gusta ser periodista hasta que con otro oficio mi cuenta en banco Suizo obtenga, así que por favor no fregar con derecha, izquierda o creencia religiosa por que para ello el fútbol y los goles siempre están presentes.

domingo, 24 de noviembre de 2013

A está elección le digo NO y con mucha honra en la revocatoria voté por el SI

Así me muera de hambre pago mi multa en un mes, no puedo apoyar una elección donde más allá de un hecho revocatoria en donde voté por el SI a mucha honra y sin vergüenza, solo genera 22 regidores que no tienen propuesta y menos eco para hacerse escuchar, y eso se puede ver no en la poca publicidad, sino en la escasa o nula capacidad de llegada o empatía con una población que no solo ha dejado de creer en la clase política, sino que te meten una multa por un derecho o principio de la libertad, el cual indica que no puedes apoyar en un sistema que no crees por que cada elección te ha fallado y si no vota los partidos se cobran la revancha poniéndote una multa por expresar mi voluntad de no votar, eso es democracia pregunto yo?

jueves, 21 de noviembre de 2013

Sobre los recuerdos y la memoria...

"Me acuerdo de lo que me hace reír, de lo que te hace sonreír y de lo que me ayuda a joder", frase del Guardián de Leyenda, Vladimir Rendón, esposo de Mei Ling y caminante nocturno con Bucky, el amigo fiel.

martes, 19 de noviembre de 2013

Instituciones de justicia por un Soñador de la Justicia

Para investigar los hechos de momento existe la Fiscalía, para juzgar y dar juicios de valor con miras a la resociabilización o el exilio definitivo existe el Poder Judicial para reclamar el derecho a mi reinvindicación personal existe el Tribunal Constitucional, para orientar el futuro existe el Congreso para tomar acción y mejorar el día día de mi país existe el presidente con sus ministros, las municipalidades y los gobiernos regionales, para evitar la corrupción y que la malignidad nos invada existe la educación y para estar en armonía con nosotros existe la salud y sobre todo la salud mental y para abrazarnos existe la familia y el ser amado. Buenas noches soñadores de la justicia. 

sábado, 16 de noviembre de 2013

Si Real Madrid tiene a CR7, la familia Rendón tiene a RRZ



Buenas tardes soñadores de la justicia hoy estamos 16 de noviembre en 10 si estuviera vivo mi abuelo Roberto Rendón Zuñiga (RRZ) cumpliría 110 años y estoy seguro estaría más parado que Cristiano Ronaldo, también conocido como CR7 por el número de camiseta que usa en el Real Madrid.

De hecho mi abuelo era un soñador de la justicia, esposo comprometido, padre abnegado y abuelo incomprendido por mi. Don Roberto tuvo hasta lo que se tres hijos, seis nietos y hoy tendría igual cantidad de bisnietos si la memoria y las sumas con restas no me fallan. RRZ era un poco más que un abuelo, era algo más que un esposo y nunca miró a mi madre (Ana María) como nuera sino como hija.


Ya van a hacer varios años desde al cielo se fue para encontrarse con doña Serafina, una abuela de quien solo recuerdo la comida de una olla que nunca probé y donde cada domingo que fui a la ya seguro inexistente casa de Ingeneria había chupe de camarones y en una fuente de la cocina al costado de la puerta de la sala había ocopa y rocoto relleno en una fuente metálica color blanco con bordes azules, muy típica en los años 80.


Serafina quien de manera física no está cerca de RRZ, pues ella enterrada en los Barrios Altos está en un lugar llamado El Ángel y él en un camposanto en las puertas de Lurín (al sur de Lima), le pidió a mi hoy anciana nana Dorita y Sonia (amiga de mi familia) cuidarán al “viejo”, minutos antes de partir, casi llorando y en el último respiro de vida en un febrero ya lejano de 1986, mi abuela solo quería saber que mi RRZ en buenas manos sería atendido en una vejez que no fue yo hubiese querido, pero que fue como uno de sus hijos le dio en agradecimiento, no dicho por él, pero si hecho por mi mamá.


De hecho RRZ vivió oficialmente según su ya inexistente libreta electoral hasta los 98 años, aunque por allí el día de su muerte en el verano del 2001 una versión y cruce de datos dio a entender que este caballero nacido en Viraco tenía en realidad 101 años, sorpresa, misterio o duda de la cual nunca sabré la respuesta no lo sé, pero RRZ solo sabía decir “tengo más de 90 y parezco de 70”.


RRZ aunque parezca nada creíble y nada visible tenía más ganas de vivir que CR7, pues si algo él tenía era una familia, eran tres hijos y varios nietos de los cuales orgullo siempre sintió, además tuvo cuatro hermanos Edilbertha, Práxides, Luis y Jacinta, está última en mención la única viva y la única profesional, gracias al trabajo de padre que tuvo con ella RRZ.


Luis era menor que RRZ, era policía, tenía más de un hijo que a mí el último nieto de RRZ siempre me dijo al norte a pelear por la huaraca y esto último era una consigna que él no sé, si cumplió, pero el cigarro que consumía y que lo extinguió no me dejó ver.


Sobre mi tía Edilbertha y Praxides puedo decir que seguro RRZ está al costado de ambos leyendo el diario y preguntándose al amanecer si ambos “están buenos”, que era la manera que los hermanos Rendón Zuñiga tenían para preguntarse si estaban bien, de Luis que puedo decir solo se que él algo lejos debe estar no por estar al otro lado del cielo, solo que él sin duda está al costado de quien hoy lo mima con la misma ternura que pasó el día que nación, me refiero a su mamá Raquel, la abuela de mi papá y también la madre de RRZ.


RRZ era algo especial, aún más que el resto de hermanos no por ser mi abuelo, sino porque era de las pocas personas que podían haber sido ministros de Economía y titular de Industria con Trabajo al mismo tiempo, es que mi abuelo ahorraba como solo lo he visto hacerlo a mi padre, trabajaba de todo porque hasta zapatero fue luego de salir del Ejército y la Policía, laboró en una fábrica de detergentes y esperaba la línea 58 del Enatru que lo llevaba desde Higuereta a Ingeneria a finales de los 80.


RRZ votó por Vargas Llosa el noventa, tenía en sus sueños de banco a Alan García ya que por el lío de la estatización de la banca en el 88 sus ahorros en dólares congelo y solo recibió luego de ese enredo un certificado por cinco mil intis, hoy el equivalente a cinco soles o menos de ello.


Desde julio del 90 y hasta que habló de política en 1998 su presidente constitucional de la República se llamaba “Fujimoro”, porque decía “ese señor es tal cual un moro de Arabia que invadió Perú como pasó en España” en los siglos del pasado de los cuales solo leyó y conversó con mi otro abuelo Rosendo (papá de mi mamá) y Alfredo (tío de mi mamá).


Es que RRZ en realidad tenía algo más que humanidad, tenía a Dios en cuerpo y mente sana así él haya dicho varias veces lo contrario y digo cuerpo sano porque aunque sentía las fuerzas lo dejaban siempre caminó varias vueltas a la manzana alrededor de mi barrio, siempre hizo ejercicio antes de entrar a la ducha y siempre oró antes de dormir y al levantarse a las cinco de la mañana para comprar pan hasta 1994.


RRZ tenía algo que según las mujeres de hoy no existe, pero en él era real y me consta porque si de mujeres habló como novias y enamoradas solo fue de mi abuela, su esposa doña Serafina, aquella mujer que conoció en la niñez de un pueblo de donde solo salía a pata de caballo y descansaba en parada de burro, llamado Virado en un lugar de la provincia de Majes en la hoy región Arequipa.


Si RRZ estuviera vivo y quisiera hablar contigo no usaría celular ni línea fija simplemente te busca, te toca el timbre y te espera hasta que lo atiendas, si RRZ conoció el amor fue por la mirada de doña Serafina que desde yo cumplí cinco años, solo recuerdo con los lentes de poto de botella verde que usaban los señores y señoras adultos mayores de aquella época.


Fue en 1986 cuando me arrodillé con él al píe de su cama a hacer tareas de tercer grado de primaria, fue RRZ quien solo sumó restó, multiplicó y dividió con una libreta, frejoles, y su cabeza que tenía memorizada las tablas de los ejercicios aritméticos al revés y al derecho.


Si hoy en día usted usa el termino o las palabras nada gradas para referirse que tonteó a una persona, con RRZ con lo hubiera podido hacer, si usted creía que tomó avión para ir y venir, pues RRZ tenía una oración, buena fe, sensatez y mucha lectura para decirle “usted no crea que tonto soy he vivido más que usted, he sido desde obrero hasta militar y no podrá engañar”.


RRZ hoy descansa en paz lejos de su Viraco natal, lejos de Arequipa donde nació mi tío Edmundo y lejos de Puno y Cusco donde nacieron sus hijos Jorge y Roberto, pero está cerca de uno de los nietos que seguro sus caricias sintió, Javier, y está cerca de donde Roberto Rendón Acat (mi hermano) pasa para trabajar y relajarse un fin de semana con parada previa para saludar al abuelo que no hemos olvidado.


Y si usted camina por Higuereta, ve a una persona que camina que igual que RRZ, tiene su misma estampa de espaldas claro está y con el mismo bigote que mi abuelo nunca se afeitó, no se confunda que RRZ en el cielo ya está, quien tomó su lugar es un hombre que se graduó en la terquedad y el engreimiento de la mimada abuela Raquel Zuñiga Huaco, es pues el guardián que heredó de don Roberto Rendón Zuñiga la misma estampa y el mismo regatear, así como la misma alma brava por amar, es que RRZ dejó en tierra tres hijos y un hombre que hasta ahora no acepta su padre este lejos y quiere ser igual a él.


El que camina con un perro en la mano y esperando no ser reconocido, pero si amado por mis actos, no es RRZ es RRV, me refiero a Roberto Rendón Vásquez de quien solo se puede decir que extraña a su padre y su terquedad con astucia saco de él.

   

       

viernes, 8 de noviembre de 2013

Padre peruano: cuando el pasado no te deja libre para volar al futuro

Es hoy un momento de conectar mi corazón, mi mente con mis dedos y teclear lo que mi conciencia manda, puesto que aunque fujimorista me declaro y mi voto por Keiko a ciegas es, no puedo dejar de decir que el tema de los derechos humanos es un tema que nos da pleito, pero no acuerdos y derechos por defender.

Si soy fujimorista, no cegado, es porque reconozco que Alberto Fujimori encarnó en los 90 un cambio de visión del Perú que como todo en la vida trajo cosas positivas y negativas, trajo trabajo, pero no nos cambio de conciencia y menos de hábitos, nos dio si una economía emergente, repelió al bill terrorismo que hoy en día ha tomado la forma de inseguridad ciudadana.

No puedo aplaudir a los colina, que ya bien presos están, tampoco me pidan que sienta dolor por tanto terrorista y mal nacido que echa a perder a jóvenes atrayéndolos a los malos hábitos y despojándolos de la fe en el mundo por cambiar, ahora los malos hábitos asistencialistas ya existían en el Perú antes de Alberto Fujimori y la fabrica de vagos sigue existiendo gracias a un cheque de 100 soles que el Estado te regala con mis impuestos que para mil cosas puede servir (léase programa Juntos).

Ahora no hay que ser pobre o predicar pobreza para ser de izquierda, así como tampoco se es explotador o inhumano si es de derecha, al contrario la historia demuestra que la derecha es la que genera riqueza y aporta con los programas humanitarios del mundo para generar riqueza y la izquierda con “B” moles muy marcados promueve la solidaridad que tan necesaria es, pero también mal entendida y distorsionada por ellos mismos.

La derecha en si es un amor por el trabajo y el respeto por el capital ganador que repercute de manera directa en tú familia, la izquierda si tuviera apertura para no insultar y no promover marchas que destruyen honras sería mucho más respetable y la derecha si tuviera menos heridas provocadas por las muertes terroristas sería más compresible.

No castigo a la izquierda puesto que de una familia de izquierda vengo, pero a su vez también vengo de un padre que a la violencia diaria me somete junto con mi madre y es una violencia cuya arma son los gritos, la indiferencia y enrostrarte tus errores a diario haciéndolos ver a ellos como los sumo sacerdotes de la moral, una moral que puede entender, que es valida, pero que en su caso es extrema y descarnada para conmigo.

Ahora tengo grandes amigos de izquierda que me dieron apertura a la conversación, que me dieron fe, trabajo, oportunidades y esperanza en mi, así como también muchos de derechas o otros mucho más fujimoristas que solo creían en mi.

Sería muy mezquino y mal agradecido sino reconociera lo que muchos de diversas corrientes ideológicas hicieron por mí, por ello aunque me tenga que morder la lengua no puedo criticar a ninguna de las partes, tampoco puedo aplaudir lo que a diario hacen, y menos puedo ser tolerante con el insulto de hechos que no volverán a repetirse, pero ellos o todos no entienden ello de buena fe, será que la buena fe se perdió en el tiempo y en los albores de una historia donde manda la pasión por la revancha, pero la sensatez por la paz.

Es para mi difícil escribir esto mi padre es el primer soñador de la justicia que conozco, mi madre es a su manera una heroína en el mundo que la rodea, mi hermano una persona que se la faja por sus formas de ser que a él le resultan para bien, y yo soy una oveja negra que no comprendo a cual de los mundos pertenezco.

Se que donde estuve o donde estoy siempre doy todo de mi, muchos me creen un aprovechador, otros un interesado, muchos otros un huevón a la vela, pero yo solo creo que soy alguien no se encuentra consigo mismo, puesto que aunque con mi familia a diario por que ellos así con su ejemplo me educaron, solo se que amo ser feliz con Mei Ling y amo ser periodista así mi ámbito de acción sea solo una pc, sin poder narrar la realidad que no es dura, solo es complicada para poner en juego nuestra imaginación y cambiar el mundo a uno que sea mejor que hoy.

 

PD: Dedicado al primer soñador de la justicia que debe de ser quienes más me aman, pero más me enrostran los errores atándome a un pasado que no me deja cambiar: Roberto Rendón Vásquez, mi papá.

lunes, 4 de noviembre de 2013

Papá: la historia del rey que no quería dar la mano


 

Esta es una narración dada después de un hecho ocurrido en 1993 una noche de verano en un lugar cuyo espacio físico aún existe, más no el alma con el que fue creado, se trata de mostrar como un soñador de la justicia que dio origen a este blog me mostró como manejar situaciones complicadas, lección que hasta ahora creo no haber aprendido y él a veces parece no aplicarlas en mi.

Resulta que mi papá don Roberto Rendón Vásquez, o el doctor Rendón Vásquez para todos aquellos que lo conocen por su raza y abolengo de abogado corajudo, un día tenía una practicante en su oficina de nombre Dalmacia (que hoy en algún lugar del mundo o Lima debe andar) y por aquellos días tenía un cliente que no recuerdo de cara y nombre, pero si la situación complicada que aquella noche de verano del 93 pasó.

Este señor tenía un juicio que estaba llevando mi papá como abogado laboralista y algo desesperado estaba mientras mi papá no llegaba y en la oficina aquel día o noche estamos Dalmacia, mi hermano (estudiante de segundo de derecho por entonces) y yo que estaba en vacaciones de tercero de secundaria.

El señor desesperado, mi hermano y yo de espectadores por aquel entonces y por supuesto Dalmacia quien tenía que manejar la situación de un señor que quería respuesta a su juicio, pero mi papá por algún motivo no llegada.

El señor desesperado (con razón o sin ella no lo sé) perdió la calma, discutió con Dalmacia y luego disgustado se fue.

Ya en el carro con mi papá, Roberto, Dalmacia explicando la situación y yo solo creyendo o habiendo sido testigo de lo testarudo que era el señor, solo escuchaba a mi papá entender el contexto, saber cuál había sido la reacción de todos y pasó a contar lo siguiente:

“Hace años en la era de las cruzadas había un rey que no solo era ostentoso, sino como toda persona vanidosa y cuidadosa con recelo de que lo da y mantiene en su furia de amo todo poderoso lo que nunca os dará, se estaba ahogando en una laguna de agua tibia y todos sus caballeros con la corte dorada le decían uno tras otros(eran como 20 según mi papá) ´señor  deme la mano y yo os salvo su vida´-por supuesto el rey no daba la mano y seguía pataleando para lograr no ahogarse-, así nadie comprendía porque este rey no daba la mano y sin embargo tampoco quería morir ahogado- quien entiende a este rey tan terco y yoista, se decía en la corte real, pero en un momento un sirviente de la cocina del rey se acercó y señaló que salvaría al rey”, eran las palabras de papá al manejar por la avenida Arequipa y luego dirigirse a la residencial San Felipe, donde su amigo Fredy Arana nos esperaba para una reunión en su ya extinta agenda de viajes.

Papá que por aquellos días manejaba un Peogueot, color blanco y se reponía de un accidente en su brazo derecho y tenia como hasta ahora lo tiene el don de escuchar a todos menos a mí, aunque terco nunca dejó de ser, seguía contando la historia que de seguro lo marco tanto como a mi.

“Bueno pues el sirviente que conocía bien los gustos del rey al servirle la comida diariamente se acercó al lago, se arrodillo en la orilla, extendió su brazo y solo atinó a decir ´su majestad os ofrezco mi mano, pues usted para dirigir al reino debe de salvarse, porque de ello depende la felicidad de miles de personas y el futuro de los niños de este lugar´, aquel rey por supuesto se salvó”.

La moraleja a mis 14 años aún no la comprendía en el segundo en que mi padre terminó de hablar tomo un respiro, paró en el semáforo de la avenida Gregorio Escobedo, donde ahora hay un grifo Primax y donde antes se filmó la novela Natacha, esperó hasta volver a avanzar y dijo este señor que por aquel momento vestía como siempre y hasta hoy zapatos negros, camisa blanca y un terno color marrón, que debe estar en el closet de mi abuelo, junto a la colección de bastones que el padre de mi padre usó hasta el año 2001 en que falleció don Roberto Rendón Zuñiga.

Y la moraleja en palabras de mi padre fue: “un cliente es un rey, al que no se puede decir no, tampoco siempre si, pero hay que saber que el soberano de toda empresa es quien paga por el servicio y hay que buscar la manera de halagarlo mientras se le hace sentir bien frente a una complicación, el cliente o rey busca una solución de nosotros y no un problema que llevarse a su casa, el cliente y el rey buscan irse a dormir sin preocuparse del día siguiente, solo sabiendo que allí estaremos nosotros para ofrecerle u otorgarle una solución a su problema”, eran las palabras de mi papá mientras estacionaba su Peogeot ya inexistente frente un local comercial, que hoy es Plaza Vea de San Felipe.

Tal vez porque sea mi papá y yo no su cliente, no me ofrezca invitarme a irme de su casa donde vivo desde que nací, sino me eché a diario en un lugar que no es olvidado que no será destruido y estará en la familia Rendón como el santuario que don Roberto Rendón Vasquez, construyó para su familia y más que para su familia sea el lugar donde descansen la memoria de Roberto Rendón Zuñiga y Serafina Vásquez Fernández de Rendón, sus padres, mis abuelos y quienes dieron vida junto a los Acat- Koch, a esta familia a la que tal vez no debí pertenecer, pero que los amo como el primer día o noche que recuerdo en mi memoria, cuando mi hermano Roberto jugaba conmigo a ser peluquero y mi papá abrazaba a mi mamá observando lo que yo robé y nunca podré reponer sus marfiles y el cariño que de ellos tres que ya no me pertenece más.

Te amo papá, te amo don Roberto Rendón Vásquez, el primer soñador de la justicia, por lo menos así es dentro de mi.

Con cariño el hijo tuyo que jamás debí ser, Vladimir Rendón Acat.