Justicia de humanidad

Definitivamente el ser humano es un ser necesitado de justicia, por ello nacen los justicieros que no es más que una fiebre nacida del fondo del ser humano que busca justicia, pero la fiebre es síntoma de una enfermedad que tiene cura, pero cuando arde lo hace con ira ante la desesperación de quienes no encuentran esperanza en su corazón de un mañana mejor. En el mundo de hoy corrompido y cautivo de la muerte yo escojo un sentido del deber que me lleva de lo que debo hacer hasta lo que puedo hacer, pasando por lo tal vez debería de hacer, por ello declaro que lo único que puedo hacer es tratar de reconciliarme conmigo mismo, pensar en que hoy mis problemas terminarán por mis acciones para conseguir respuestas y resultados positivos, aunque nada de ello funciona si por los problemas diarios me dejo abatir, no busco ser un justiciero, pero si busco una oportunidad para vivir con una ilusión para soñar con un mundo mejor y ello únicamente emana de Dios, en cualquiera de sus formas. Entonces yo renuncio a no hacer nada, para decir la vida me dio mil oportunidades para vencer, levantar la copa y decir a los cuatro vientos y en todos los continentes: "Mei Ling hoy tendremos un hogar como el que siempre soñamos y te amaré como si la primera vez que te pedí permiso para un beso entregarte, te amo chinita y te amo familia mía, como primera vez que sentí tu abrazo papá y mamá".